Es bastante habitual encontrase con personas que postergan la atención al malestar psicológico, es posible que esto ocurra por muchas razones, algunas que escapan de nuestro control como es el económico, en ocasiones y debido a la deficiente forma de funcionar del sistema sanitario público/gratuito (no por negligencia o impericia sino porque este mismo se encuentra saturado desde hace años, encontrando una mayor demanda para el poco número de sanitarios que atienden), el paciente se ve en la necesidad y casi obligación de buscar ayuda de forma privada, en ocasiones el mismo no se lo puede permitir y es cuando lo deja de lado.
En otras ocasiones el laxar la atención del mismo responde propiamente a otras cuestiones más de índole subjetivo y de decisión, nos referimos propiamente a la subestimación del problema y del alcance del mismo, a la no contemplación de la posible cronificación. Otra de las posibles razones esta explicada por el estigma y la demonización hacia aquello que está relacionado con la salud mental (aunque cabe destacar que en la actualidad esto va perdiendo fuerzas y la población mundial definitivamente está derribando este disfuncional estigma). Podemos encontrarnos que los problemas de la vida, trastornos emocionales y mentales nos llevan a los seres humanos a experimentar malestar subjetivo fluctuante, esta fluctuación puede llevarnos a confundirnos, hasta el punto de creer que desaparecerá espontáneamente, de la misma forma en la que fluctúa sin darnos cuenta de que estamos incurriendo en un craso error.
Ahora bien, pesemos en positivo, miremos hacia un mejor y saludable futuro, aprovechemos los recursos y las facilitaciones como puede ser la terapia online que nos acerca a las posibilidades de atender no sólo a nuestra problemática psicológica sino también a los ahorros que nos representa este formato de eficaz y eficiente asistencia, abramos nuestra mente, seamos valientes ya afrontemos el malestar. Desde Mejor Sin Ansiedad te animamos a que des comienzo a tu proceso terapéutico.
10 señales básicas parara acudir a un psicólogo
A continuación, ofreceremos 10 de los que consideramos señales básicas parara acudir a un psicólogo:
- El bajo estado de ánimo no es fluctuante, sino que este mismo se ha instalado en tu vida. Te encuentras deprimido la mayor parte del día, todos los días y esto viene ocurriendo desde hace más de una semana. Incluso los pensamientos de muerte o de ¨desaparecer¨ de hacen muy frecuentes.
- Ha ocurrido un episodio traumático para ti como puede ser la pérdida de un ser querido, de un trabajo, una enfermedad, divorcio, agresión, etc. Tienes flash bag o rememoras mucho el acontecimiento, tienes pesadillas con ello, interfiriendo significativamente en tu vida y salud en general.
- Recurrencia de pensamientos de índole intrusivos y negativos, que provocan malestar, ansiedad, te paralizan, aíslan, te llevan a recurrir a realizar conductas (incluso extrañas y hasta repetitivas) hasta conseguir bajar la ansiedad/malestar que producen estos pensamientos.
- Presentas acusados y frecuentes desregularizaciones en el sueño (insomnio, parasomnia), en la conducta alimentaria, aumento de peso acusada o incluso pérdida del mismo en un tiempo corto (sin hacer dieta y exento de patologías fisiológicas conocidas).
- Recurres a sustancias, conductas (alcohol, autolesiones, drogas, juego, sexo, compras compulsivas, etc) con el fin de ¨fugar¨ ante el malestar que te producen de forma consciente o no consciente algunas situaciones de la vida.
- Te cuesta relacionarte con las personas, bien porque te cuesta ¨leer sus emociones¨, no sabes establecer límites, te cuesta decir que no, te bloqueas ante las interacciones con más de dos personas o al hablar en público.
- Perdiste el interés por todo en la vida, sientes depresión, sientes insatisfacción incluso por aquello que en el pasado te producía, alegría, entusiasmo, interés y placer.
- Tu autoestima va de mal en peor, cada día te quieres menos, confías menos en ti.
- Te cuesta mucho regular tus emociones, incluso hasta el punto no sólo de producirte labilidad sino problemas con los demás y producirte un gran malestar emocional.
- Nos encontramos estancados, somos incapaces de tomar decisiones, concentrarnos, memorizar.
¿Cómo es la intervención ante estas problemáticas?
Lo primero es establecer unas primeras sesiones que nos servirán para evaluar, hacer un análisis funcional del problema, una devolución de lo evaluado, establecer unos claros objetivos consensuados y un definido plan de tratamiento.
Desde la primera consulta te llevaras pautas, tareas y una línea de trabajo. En Mejor Sin Ansiedad podemos ayudarte.